domingo, 15 de enero de 2017

En el filo de la esperanza

Hace un siglo la humanidad entraba en decadencia.
En aquella decadencia que pareciera repetirse en una constante.
El finiquito del alma, de lo humano en post de la manifestación de la radicalidad;
de lo objetivo, de lo racional y lo supuesto perfecto, de aquello que se interpreta como el suicidio del alma.
Hace un siglo el existencialismo plasmó el final de una era, 
tras un siglo decadente, en el cual, tanto el odio y el amor convergieron.
El fin del alma, y de la exaltación del Ser llegó a la cumbre.

Podría ser una mirada,
algo especial,
un recuerdo,
un beso bajo la luna y la mirada de las estrellas,

la conexión de dos miradas bajo la construcción de un nuevo mañana,
la unión de dos almas que se imponen ante la exigencia del pasado…
Sólo quiero mirar un ángel,
ante la desgracia que retorna de nueva cuenta en un siglo decadente.
Más allá del odio,
Más allá del amor,
Más allá de los recuerdos…
¿Hasta qué punto la esperanza puede sobrevivir en la penumbra?,
¿Hasta qué momento la esperanza puede diferir de la utopía?
Si el destino permitió triunfar ante la adversidad,
Si el devenir regaló una nueva posibilidad ante la tragedia.
¿Será acaso el momento de desertar?
¿Será el tal vez el momento de volver a morir?, porque como existe un momento para vivir también lo existe para morir…
¿Será tal vez el tiempo de renacer de las cenizas?
Si el tiempo fuera consejero pediría mil veces a tiempo regresar al comienzo, y no dar vueltas al destino,
Pediría mil veces regresar al inicio y escuchar a las sombras que palpitan la génesis de la existencia…
Nadie dijo que la vida era sencilla cuando ésta muestra al edén frente a las desgracias de la vida.
Nadie dijo que la maldición sería tan fácil de sobrellevar, cuando no existe oportunidad de revertirla.
Si el tiempo fuera consejero pediría mil veces regresar al él,
Regresar al comienzo,
Regresar al inicio de esta historia para poder vivir en soledad sabiendo de mi ocaso,

Sabiendo de lo ajeno, sabiéndome desterrado…
¿Hasta qué momento mis cartas seguirán hablándote?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario